Los tumores son crecimientos anormales en el cuerpo. Pueden ser benignos o malignos. Los tumores benignos no son cáncer, pero los malignos sí. Los tumores benignos solo crecen en una parte del cuerpo.
Los tumores son crecimientos anormales en el cuerpo. Pueden ser benignos o malignos. Los tumores benignos no son cáncer, pero los malignos sí. Los tumores benignos solo crecen en una parte del cuerpo. No pueden aparecer ni invadir otras partes del cuerpo. Aún así, pueden ser peligrosos si presionan órganos importantes, tales como el cerebro.
Los tumores están formados por células extras. En general, las células crecen y se dividen en otras células cuando el cuerpo las necesita. Cuando las células envejecen, se mueren y otras células nuevas toman su lugar. Algunas veces, este proceso no resulta como se espera: se forman células nuevas, aún cuando no son necesarias y las células viejas no mueren cuando deberían. Cuando estas células adicionales forman una masa, se les conoce como un tumor.
Alrededor de la boca encontramos las glándulas salivales cuya función es producir saliva que a través de conductos desemboca en distintas areas de la boca, protegiendo los dientes de las caries y humedeciendo los alimentos facilitando así la masticaciones y la deglución.
Las principales glándulas salivales son: Las parótidas ubicadas frente a las orejas en cada mejilla, dos glándulas submandibulares y dos glándulas sublinguales ubicadas debajo del piso de la boca.
Cuando proliferan células anormales en las glándulas o los conductos salivales se forma un tumor. El tumor benigno más común afecta en la glándula parótida, aumenta su tamaño y se caracteriza por un crecimiento lento. Los tumores de los conductos salivales no son muy comunes.
Los síntomas más comunes son la aparición de una hinchazón que aumenta de tamaño, indolora y firme en una glándula salivar y parálisis del nervio facial.
Para confirmar el diagnostico se realizan exámenes como: sialograma, ultrasonido, tomografía computarizada, resonancia magnética y biopsia de las glándulas salivales.
Tratamiento: Cirugía para extirpar la glándula salival afectada. Si el tumor es benigno, no se necesita ningún otro tratamiento.